SER FELIZ NO TIENE PRECIO: CRÓNICA DE UNA NIÑA MUY ESPECIAL
"Lamento mucho señora tener que comunicarle que desafortunadamente su niña nació con problemas y no va a ser una chica normal". Estas fueron las palabras que Martha Cardone, de 21 años, escuchó del médico que ayudó a traer a este mundo a Mariana Esther.
Un año después de haber nacido Mari, como la llaman sus familiares, el doctor se dio cuenta que algo no marchaba bien y le recomendó a su madre practicarle unos exámenes para ver qué pasaba en el pequeño cerebro de la niña. Los resultados de los estudios practicados a la pequeña, arrojaron que Mariana sufrió un grave daño en su sistema motor, y sus cuerdas vocales se vieron afectadas al momento de nacer por falta de oxígeno en su cerebro.
Al pasar el tiempo y ver el lento desarrollo de Mariana, no caminar sino hasta los 3 años, no levantar la cabecita, ayudarla a realizar sus actividades y no escucharla hablar; a esta madre no le quedó la menor duda del diagnóstico tan repentino que el doctor le había dado al año de haberla traído al mundo, pero sirvió como impulso para dedicarse a la niña en cuerpo y alma y que nunca le faltara nada.
Al crecer la pequeña, le recomendaron a los padres llevarla a un colegio de niños con diversas discapacidades y limitaciones especiales como Mariana. Fue así como la madre de Mariana convencida de la necesidad de su pequeña por integrarse al mundo, la ingresó a sus primeras clases de estimulación en las cuales percibe todo tipo de texturas, sonidos y colores. En el colegio la enseñaron a pintar, a relacionar los nombres de las cosas con sus respectivos objetos, a diferenciar sus necesidades fisiológicas, entre otras. Ella, como muchos alumnos más del centro, son estimulados, educados con herramientas para hacerlos personas independientes ante el mundo.
Hoy día, Mariana tiene 30 años y es una joven sana, que a pesar de que tiene muchas limitaciones, ha desarrollado una inteligencia extraordinaria y puede realizar distintas actividades que no se creía las lograría como: caminar sola, comer sin ayuda de sus familiares, y pronunciar las palabras más anheladas por sus padres que son: mamá y papá. La dedicación y el amor de sus familiares por la niña, han hecho de Mariana una joven muy dinámica, alegre, que le encanta comer, dormir y sobretodo ver fotos y revistas.
“En la actualidad, la sociedad ve con desprecio a estas personas con discapacidades y limitaciones físicas pero no pueden saber la felicidad que trae al hogar tener una persona tan especial”, comenta su madre. Diversas asociaciones civiles a lo largo de los años, se han fijado el objetivo de hacer valer los derechos de estos seres como personas y como ciudadanos iguales a los otros, involucrándolos en la sociedad, en el ámbito educativo y laboral.
Hola Angely,
ResponderEliminarEstructuras muy bien la crónica, pues ordenas los hechos de forma que es interesante leerlos. Me gustó también la cita con la que comenzaste el texto. Acá podemos notar un avance importante en tu habilidad para narrar, desde el primer texto de la clase ¡muy bien! ;) Recuerda seguir leyendo, para entrenar las habilidades de encontrar historias y jerarquizar y estructurar informaciones, que sin duda te servirán en el futuro.
Un abrazo,
Jesús.